Ya te hemos explicado cuáles son los tipos de incontinencia urinaria, sin embargo, la detección de esta afección parte del buen diagnóstico de un especialista.
En principio, el médico realizará un análisis físico que incluye examen de la zona pélvica, genital y rectal, con el objeto de determinar si existen otros problemas de salud que estén causando la afección.
Durante el examen físico es muy probable que el médico te pida toser, brincar o reír a fin de evaluar el comportamiento de la vejiga antes, durante y luego de la prueba de esfuerzo.
Los análisis de laboratorio también serán fundamentales para evaluar la función renal o, incluso, atacar infecciones de orina muy frecuentes en estos casos. Finalmente, será propicia la evaluación mediante imágenes de la vías urinarias con el fin de descartar lesiones que estén impidiendo una adecuada función vesical.
Es propicio resaltar que las mujeres embarazadas pueden presentar incontinencia urinaria en el tercer trimestre debido al peso que el útero ejerce sobre la vejiga. Después del parto se puede intensificar la patología a causa del debilitamiento del piso pélvico.